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¿Cómo se realizan las excavaciones paleontológicas? Parte 1

El tema de la Paleontología y los fósiles es apasionante, y por eso genera un cierto halo de romanticismo sobre la tarea de los paleontólogos, que la literatura y la filmografía presentan como apuestos y sagaces aventureros que siempre buscan y encuentran espectaculares restos de dinosaurios, mamuts y gliptodontes.
Bellas imágenes por cierto, pero que sólo pintan una muy pequeña parte de las tareas del paleontólogo, que muchísimas veces debe procesar tediosamente kilos y kilos de sedimentos, para obtener de ellos unos pocos gramos de microorganismos fosilizados que sólo se verán luego bajo el microscopio o la lupa binocular.
En muchos casos, ni siquiera se llevan a cabo las consabidas excavaciones que aparecen en las películas y en atractivos documentales, sino que directamente se procesan muestras extraídas como parte de la rutina en el estudio de perfiles prometedores, que no siempre arrojan grandes resultados.
Pero eso no hace menos apasionante la información que aun esos diminutos fósiles siempre llegan a aportar.
Por eso este post luego de arrojarles un baldazo de agua fría a los fanáticos de la ciencia ficción, les va a dar, no obstante, con el gusto, y expondrá algunos puntos relativos a esas grandes excavaciones que tanto desafían la imaginación popular.
Por lo extenso del tema, todo el texto estará dividido en dos posts correlativos de dos días lunes sucesivos.
Entonces cabe preguntarse para empezar:
¿Qué condiciones se tienen en cuenta para buscar, hallar y extraer fósiles de gran tamaño?
En primer lugar, el contexto geológico.
Sólo determinados tipos de rocas, ciertas posiciones del paisaje y materiales de edades específicas pueden dar lugar al hallazgo de cada tipo de fósil en particular.
Es decir que todo emprendimiento de búsqueda sistemática requiere un exhaustivo análisis geológico previo y una concienzuda planificación.
Las excavaciones son costosas y demandan mucho tiempo, equipamiento y esfuerzo, de modo que no pueden realizarse de manera caprichosa, simplemente cavando a tontas y a locas en cualquier lugar.
Es verdad que hay casos de hallazgos fortuitos, por ejemplo por parte de obreros de la construcción que se encuentran realizando pozos con otros fines, o por turistas y/o lugareños que vagabundean o transitan por sitios agrestes.
O por geólogos abocados a investigaciones de otras especialidades, y por supuesto por paleontólogos que buscan algo diferente, pero cuyo ojo entrenado detecta una mínima parte expuesta de un fósil enterrado.
Todos estos casos son muy interesantes y habrá a lo largo del tiempo, numerosas anécdotas, ejemplos e historias en diferentes posts.
Una vez detectado el fósil individual o el posible yacimiento fosilífero ¿qué se hace?
En la mayoría de los países del mundo existen leyes que protegen el patrimonio científico, cultural, histórico y paleontológico, de modo que todo el procedimiento tanto de búsqueda como de extracción de ejemplares fósiles está claramente regulado y se ejercen estrictos controles al respecto.
De esta manera, resulta que todo el proceso está precedido por largas y tediosas tareas administrativas y gestiones que dan un marco legal a la actividad. A menos que se trate de buscadores furtivos dispuestos a delinquir (buen tema para el futuro en el blog).
Si los yacimientos fósiles son importantes y se conocen previamente, casi siempre su acceso está vedado para toda excavación no encuadrada en proyectos debidamente autorizados, protocolizados y estrictamente controlados.
Esos proyectos pueden durar decenas de años y suelen irse ampliando si se encuentran nuevos restos.
Si se trata de un primer hallazgo, casi todas las legislaciones exigen que se realice la correspondiente denuncia para proteger el patrimonio.
Por supuesto, cualquiera sea el caso, otra parte no menos importante y también previa a la propia excavación, es obtener los fondos requeridos para la misma. (Otro tema a tratar en el futuro).
Después de estos pasos previos, ¿cómo sigue una excavación paleontológica?
Si el hallazgo forma parte de un proyecto científico, la geología de la zona seguramente ya ha sido estudiada o está siéndolo.
Si en cambio es un hallazgo casual, lo primero que se hace es precisamente el estudio geológico regional, y el mapeo correspondiente para dar contexto y significación a lo desenterrado.
No hacerlo sería desperdiciar todo el potencial informativo que cada fósil implica. A lo sumo serviría para adornar una vitrina en un museo y punto.
Una vez cumplido este proceso, y a veces al mismo tiempo, se emprende la excavación propiamente dicha.
Normalmente, cada equipo científico elabora su propio protocolo, adecuado a las condiciones del sitio y el ejemplar o los ejemplares, pero respetando además la normativa vigente, y algunos lineamientos comunes a todas las metodologías.
Estos lineamientos comunes son los que describiremos en el blog, pero debido a lo extenso del tema, lo continuaremos en el post del próximo lunes. Los espero entonces.
Tengan una buena semana. Un abrazo. Graciela.
La foto que ilustra el post ha sido tomada de este sitio en la red.
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¿Qué animal es Manny, el mamut de la Era del Hielo?
Hola, chicos, otra vez estoy preparando un post para ustedes, porque pienso que querrán saber un poco más sobre los maravillosos personajes que vemos en la saga de la Era del Hielo como Sid, Diego, Scrat y Manny.
Manny es un mamut, animal enorme y majestuoso, de los que existían millares en extensas zonas frías de Norteamérica, Eurasia y África hace entre más o menos 4 millones y medio de años y unos 3.700 años atrás.
Ya no hay ejemplares vivos, porque una convergencia de causas, entre las que se cuentan un cambio de clima y vegetación, una excesiva especialización, y la aparición de un predador al que antes no tenían que enfrentarse (el hombre moderno o sus antepasados más directos) los eliminaron del planeta.
Una lástima, ¿verdad? Porque sería bien lindo verlos movilizarse por las estepas con tanta parsimonia y belleza.
Pero ahora les cuento un poco de lo que la ciencia conoce sobre estos animales.
¿Cómo es el nombre científico del mamut?
El nombre que la ciencia le da al mamut es Mammuthus, y hay que tener mucho cuidado de no confundir este grupo de animales con los del género Mammut, que incluye a los mastodontes y que pertenecen a otra familia (Mammutidae). Ya vamos a ver en seguida cómo es toda la clasificación de los mamuts, y esta parte les quedará más clara.
La palabra Mammuthus deriva de una palabra del idioma ruso antiguo, маммот, que a su vez probablemente proviene de la expresión en lengua mansi mang ont, con el significado «cuerno de la tierra», en probable alusión a sus gigantescas defensas, más conocidas como colmillos.
¿Cuál es la clasificación científica del mamut?
Reino: Animalia (Esto quiere decir que es del reino animal)
Filo: Chordata (esto indica que son vertebrados)
Clase: Mammalia (mamíferos, es decir que se alimentan de la leche de su madre, como nosotros mismos)
Orden: Proboscidea (tienen una trompa móvil)
Familia: Elephantidae (son antecesores de los elefantes modernos, que pertenecen a esta misma familia)
Género: Mammuthus (extinguidos)
Ahora podés ver bien la diferencia, fijate que en el nivel de Familia, el Mammuthus es de la familia Elephantidae, y el Mammut en cambio es de la familia Mammutidae, como dije más arriba. Es ahí donde comienzan a diferenciarse los Mammut de los Mammuthus, hasta aquí toda la anterior clasificación es igual.
¿Cuántas especies de mamuts existieron?
El género Mammuthus, al cual pertenece el mamut (como Manny) abarca numerosas especies, que son las siguientes:
Mammuthus africanavus
Mammuthus columbi
Mammuthus exilis
Mammuthus imperator
Mammuthus jeffersonii
Mammuthus lamarmorae
Mammuthus meridionalis
Mammuthus primigenius
Mammuthus subplanifrons
Mammuthus sungari
Mammuthus trogontherii
¿A qué especie habría pertenecido Manny?
Manny seguramente era, o bien un Mammuthus columbi, vulgarmente conocido como mamut colombino, o bien un mamut lanudo (Mammuthus primigenius).
Ahora te explico por qué no puedo estar muy segura, y cuáles son los indicios que uso para suponer esto. No puedo estar segura porque Manny es un dibujito, de modo que no puedo mirar muchas de las cosas que se usan para las clasificaciones, ni medir proporciones, por ejemplo, que también dan pistas.
Pero puedo pensar que pertenece a una de esas dos especies por varias razones, tales como la distribución geográfica, y el biocrón.
Te cuento entre paréntesis que el biocrón es el tiempo de duración de una especie a lo largo de las eras geológicas.
En la primera película de la serie, Manny aparece coexistiendo con hombres modernos, de tal modo que no puede pertenecer a una de las especies que se extinguieron antes de la aparición del homo sapiens sapiens, lo cual me hace descartar varias especies.
Por esas razones, más su gran tamaño, y su pelaje, asumo que Manny debe haber sido un mamut colombino o uno lanudo.
¿Cómo se puede saber cómo eran los mamuts si ya no existen?
Por los restos fósiles, por las pinturas rupestres, y porque afortunadamente se han encontrado ejemplares que han permanecido congelados por miles de años, en un estado de conservación tan perfecto que hasta el pelo estaba intacto.
Uno de los datos que aportaron las pinturas rupestres, por ejemplo, es la presencia de una espalda curvada, que en los esqueletos no se conserva, porque no era de hueso sino de grasa o músculo.
De los otros restos encontrados pudo saberse que algunas especies eran más grandes que los elefantes modernos, y otras en cambio, más pequeñas.
El mamut lanudo era de los de mayor tamaño, aunque tenía una variedad pigmea.
A esta especie, precisamente, pertenece el colmillo más grande que se haya encontrado hasta hoy, con una longitud de 5 metros.
Como las distintas especies ocupaban hábitats de diferentes características, sus adaptaciones generaban alguna variación en ciertos rasgos como el tamaño de las orejas, la cantidad de pelo, la forma de los colmillos, etcétera.
Les cuento que en las especies de mayor tamaño, las muelas podían llegar a pesar hasta 2 kilos, ¿se imaginan cuánta plata les traería el Ratón Pérez?
Bueno, por hoy ya les he contado bastante, pero volveremos a hablar de los mamuts en otras oportunidades, porque hay mucha información más que interesante, relacionada con ellos.
Espero que les haya gustado el post y vuelvan pronto a visitarme. Un beso Graciela.
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Un abrazo y hasta el miércoles. Graciela.
P.S.: la imagen que ilustra el post es recortada de la misma película.
En el Día del Paleontólogo: Conceptos básicos sobre Paleontología

Por una parte con motivo de celebrarse el 25 de noviembre, el día del Paleontólogo (en Argentina), y por el otro lado debido al notable éxito de la muestra sobre Dinosaurios que está hoy en Córdoba, numerosas vocaciones han comenzado a despertarse, y ha surgido una gran curiosidad acerca de la Paleontología, de modo que no puedo menos que inaugurar una etiqueta con esta disciplina como protagonista, e incorporar en ella un par de posts que tienen su tiempo, pero que de modo insensible ya la fueron introduciendo.
Será por supuesto, el primero de muchísimos posts porque es un tema de una gran riqueza. Hoy sólo presento unas pocas definiciones.
En primer lugar, hago notar que cuando hablamos de los objetos de estudio de la Geología, adelantamos que uno de los ejes que construyen la Ciencia Geológica es el de su abordaje histórico.
En efecto, como ven en el cuadro que ilustra el post como figura 1, Paleontología es una disciplina que intenta básicamente desentrañar el pasado de la Tierra. Ahora veremos cómo.

Figura 1
¿Qué es la Paleontología?
Etimológicamente este término procede de Paleo= antiguo; ontós= ser; Logos= ciencia o tratado, de tal manera que su significado es «estudio de los seres antiguos». Y de modo más específico se refiere a seres del pasado geológico, no del pasado reciente.
De esos seres antiguos, se analiza la morfología (es decir la forma) la posible fisiología (funcionamiento), el hábitat y la relación con otros seres, lo cual permitiría reconstruir la evolución de las especies.
¿Cómo pueden los paleontólogos analizar seres de un pasado tan remoto?
Lo hacen a través de los fósiles que se encuentran en numerosísimos sitios y en diferentes estados de conservación.
¿Qué son los fósiles?
Se entiende como fósil a todo resto, indicio, prueba o vestigio de la existencia de un ser vivo antiguo, que puede hoy estar o no extinguido.
La palabra procede de fossare, que quiere decir excavar, y hace alusión al hecho de que en general aparecen enterrados en sedimentos.
¿Qué tipos de fósiles hay?
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Organismos completos.
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Restos de organismos, como caparazones, huesos, dientes, uñas, etc. Como puede notarse, los más abundantes restos son las partes duras.
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Moldes internos y externos de partes esqueletales, sean endo o exoesqueletos. Esto se refiere a estructuras sedimentarias en las que quedan grabadas en los materiales que los entierran, las formas de organismos ya desaparecidos, de manera semejante a como un niño puede hacer con su palita un molde en la arena de una playa, por ejemplo.
Existen pues como ya lo ven, numerosas variedades de fósiles y de todas deberemos hablar en posteriores posts.
¿Para qué sirven los fósiles?
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Para entender la evolución biológica
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Para establecer condiciones ambientales y climáticas de la zona en que se los encuentra, en un determinado momento del pasado geológico.
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Para reconocer posibles cambios posteriores al momento del enterramiento del espécimen, lo cual da claves relativas a procesos geológicos y geomorfológicos.
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Para establecer edades relativas de los estratos en los que se encuentran, aun cuando sea en sitios distantes entre sí.
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Para dar un intervalo posible (más grande o más chico según el caso) de edades absolutas de los estratos portadores de los registros fósiles.
Esto, como ven, es apenas una muy breve introducción a un tema que es apasionante y que nos va a convocar muchas veces. Les puedo prometer que se trata de tópicos muy interesantes, merecedores de numerosos posts cada uno.
Ahora los dejo, con un abrazo, no sin antes aclararles que el día del Paleontólogo argentino se instituyó en conmemoración a la fundación de la primera asociación de paleontólogos en Argentina en el año 1955. Graciela
P.S.: La imagen que ilustra el post la tomé de Blog Curioso
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¿Qué animal es Diego, el Tigre de la Era del Hielo?
Hola chicos, hace mucho que no hago un post para ustedes, la gente pequeña y divertida que se copó como yo con esa serie de hermosas películas sobre la era del hielo.
Y ya que estamos, les adelanto que alguna vez deberemos hablar sobre todas las veces que los glaciares avanzaron sobre la Tierra, ya que no hubo un único periodo frío como parece indicar el título de las películas. Pero, claro, no será ahora. Ahora vamos a hablar de otra cosa.
Ya hemos conversado acerca de La era de Hielo, Sid, Manny, Scrat, y hoy le toca a Diego, que como ya todos deben saber es un tigre dientes de sable.
Pero hay muchas otras cosas que seguramente no saben todavía. Por ejemplo que su nombre científico es Smilodon que en el idioma griego antiguo quiere decir «dientes de cuchillo» y no de sable, en realidad.
Ahora bien ése es el nombre del género y había varias especies, con ligeras diferencias entre sí, como por ejemplo: Smilodon fatalis, Smilodon gracilis, Smilodon californicus, y Smilodon populator.
Tal vez no sepan que hasta hubo uno que habitaba nuestras pampas argentinas: el Smilodon bonaerensis. Este bicho en particular fue descubierto en 1844 (no el bicho sino sus restos fósiles, claro) por el Dr. Francisco Xavier Muñiz, quien originalmente lo llamó Muñifelis bonaerensis, que más o menos quería decir el Gato de Muñiz de Buenos Aires.
Con posterioridad, los paleontólogos reconocieron que se trataba de una especie de tigre dientes de sable y lo rebautizaron como ya les adelanté, es decir Smilodon bonaerensis Muñiz.
No quiero irme por las ramas, pero no les quepa la menor duda de que tanto la historia de Muñiz como la del hallazgo del Smilodon son fascinantes, de modo que ya vendrán posts sobre ambos temas.
Ahora, volviendo a lo nuestro, los tigres dientes de sable eran formidables carnívoros que según parecen indicar las investigaciones más recientes, vivían en manadas, un poco al estilo de los leones actuales, y como se ve en la Era del Hielo 1.
Estos animales hoy ya no existen obviamente y tuvieron un biocrón (así se llama el intervalo de duración de una especie dada) relativamente corto, ya que aparecieron en el Plioceno superior (unos tres millones y medio de años atrás) y desaparecieron en el Pleistoceno superior (hace unos 12.000 años). Parece un montón de tiempo, pero no es mucho si se lo compara con el biocrón de algunos otros géneros y especies, como las cucarachas por ejemplo.
Pese a que no existieron por mucho tiempo, se conoce bastante sobre ellos porque se encontraron muchísimos ejemplares completos en el rancho La Brea en Los Ángeles, Estados Unidos.
De este rancho hablaremos también en otro post porque es muy interesante, pero por el momento les aclaro que allí hay un depósito de asfalto natural que en su momento conservó los restos de los animales que cayeron en él, de manera tan eficaz, que hoy se pueden estudiar perfectamente.
Por eso se conoce tanto sobre los tigres dientes de sable y se los ha podido reconstruir tan bien como ven en el dibujo tomado de Branson et al (1964).

Ya les conté más arriba que se encontraron restos de una variedad de Smilodon en las pampas argentinas, y eso significó que se organizaran expediciones en busca de tan formidable animal, al que como pasó con el megaterio, querían atrapar vivo.
Sólo que en este caso las batidas de caza fueron espontáneas, y no por mandato de ningún rey. Esos pobres tipos a lo sumo habrán encontrado algún puma, y tal vez hasta creyeron que era un cachorrito de dientes de sable al que todavía no le habían crecido los colmillos.
Bueno chicos, les tiro un último dato: estos gatitos podían pesar hasta 350 kg, o sea algo más que los tigres actuales, vale decir que fueron los felinos más grandes de la historia registrada.
Y por fin les dejo la ficha completa de Diego para que jueguen a ser paleontólogos desde ya.
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Infraclase: Eutheria
Orden: Carnivora
Familia: Felidae
Subfamilia: Machairodontinae
Género: Smilodon (Lund, 1842)
A las especies ya las mencionamos más arriba.
Bueno, chicos, un beso y hasta la próxima que seguramente será para charlar sobre otros temas muy novedosos, Graciela
Bibliografía mencionada: Branson, C.; Tarr, W.; Keller, W.1964. Elementos de Geología. Ed. Aguilar España. 653 pp.
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¿Qué animal es Sid, el perezoso de La Era de Hielo?
Si a vos te gustó esta serie de películas tanto como a mí, te invito a charlar sobre ella un poquito.
Los cuatro protagonistas de la saga La Era de Hielo son Manny, Diego, Scrat y Sid, el loco lindo que nunca pierde la sonrisa.
¿Te gustaría saber un poco más sobre el animal prehistórico que lo inspiró? Ya debes saber que es un antiguo perezoso gigante, y si bien la caricatura puede desdibujar un poco la realidad, se trata de un verdadero megaterio.

Mirá el dibujo, se parece bastante a Sid ¿verdad? Con su fuerte cola, sus cuartos traseros bien robustos, sus patas delanteras menos desarrolladas, su cabeza relativamente pequeña y las grandes garras, vemos que sí: es nomás un megaterio así que te voy a contar un poco más acerca de él.
¿ De dónde procede el nombre Megaterio?
Megaterio o Megatherium (más científicamente) es un nombre que procede de dos vocablos griegos: mega que quiere decir grande o gigante, y théion que significa bestia. Es decir que se lo denominó «bestia gigantesca» aunque en realidad se trataba de un herbívoro bastante inofensivo.
Hace unos pocos miles de años era muy abundante en el continente americano. Y se extinguió tan recientemente, que llegó a coexistir con los seres humanos. Según algunos registros arqueológicos, los megaterios formaban parte de la dieta de los antiguos pobladores de las pampas. ¡Pavada de cazadores habrán sido para animársele a tamaños bichos!
¿Cuándo se encontró el primer megaterio en nuestras tierras?
En el Río de la Plata, el primer hallazgo de restos fósiles de megaterio se debe al presbítero Torres y ocurrió en 1.787. Un día haré un post con los detalles de ese descubrimiento, porque encierra anécdotas muy entretenidas, pero por ahora sólo te quiero contar dos o tres cosas:

Primero, el megaterio era un euthérido, así que aunque haya tenido un gran tamaño (hasta 6 metros de altura, como podés ver cuando lo comparás con el hombrecito en el dibujo) no lo confundas con un dinosaurio. Recordá que los dinosaurios eran reptiles, mientras que el megaterio era un mamífero, millones de años más moderno y mucho más avanzado en la evolución.
Segundo, en nuestra ciudad, en el Museo de Paleontología de la Universidad Nacional de Córdoba, se puede ver un esqueleto completo reconstruido a partir de los hallazgos fósiles, (es como el bichito de la foto, aunque no sea el mismo ejemplar, ya que éste está en el Museo Regional Provincial «Padre Manuel Jesús Molina» de Río Gallegos)

¿ Qué podemos agregar sobre el megaterio?
Ahora te cuento lo más divertido: cuando los estudiosos del Río de la Plata enviaron a España huesos de megaterio y dibujos con el aspecto que debía haber tenido cuando aún existía, el rey español Carlos III se sintió tan maravillado, que en seguida ordenó que le llevaran uno vivo.
¡Susana Giménez, un poroto!
Carlos III llegó a sugerir que si el animal era muy peligroso para ser trasladado en barco, lo mandaran «empajado», eso quería decir que lo mataran, lo desollaran y rellenaran la piel con paja, conservando la forma original. Una especie de taxidermia o embalsamamiento muy rudimentario.
¡Todavía deben andar buscando un megaterio vivo, esos pobres tipos!
Lo bueno es que en «La era del hielo» podemos imaginar uno, y muy simpático por cierto.


En las últimas fotos, podés ver un diente de un megaterio. Fijate en el tamaño del llavero que está al lado en una de ellas, para que te des idea de la dimensión que tenía.
¡Imaginate qué cacho de Ratón Perez hacía falta para llevarse semejante diente!
Cuando escribo esto, recuerdo una perlita: en el libro de texto de Branson et al., se describía a los Megaterios como «criaturas pesadas, feas y estúpidas» Y yo digo, pesadas, bueno tal vez podríamos deducirlo de los restos hallados; feas, siempre será una cuestión de gustos, pero ¿estúpidas? ¿Y ellos cómo podían saberlo? ¿Habrán jugado al ajedrez con alguno? ¡Vaya cosas que escribe a veces la gente!
Bueno, ahora, para terminar, te voy a hacer una ficha técnica con la clasificación del animalito, según Reino, Filo, Clase, etc, que es como decir grupos, unos dentro de otros, que tienen cada vez menos integrantes, pero que se van pareciendo cada vez más entre sí.
Los nombres son muy raros y bastante difíciles, pero solamente te los doy para que te hagas el interesante con tus amigos, y porque te pueden servir en la escuela, pero no hace falta que los aprendas de memoria.
Total, vamos a ir hablando de estas cosas de a poquito, y aunque no lo creas, puede llegar a ser muy entretenido.
Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Mammalia
Infraclase: Eutheria
Superorden : Xenarthra
Orden: Pilosa
Familia: Megatheriidae
Género: Megatherium
Especies hay nueve distintas, y no sabemos a cuál habrá pertenecido Sid, porque al final es un dibujito, ¿verdad?
La foto del esqueleto del museo se la debo a la gentileza del Dr. Adán Tauber, y a la gestión de la bióloga Alejandra Mazzoni.
El dibujo donde el Megaterio se alza en dos patas, es de un apunte de dos estudiantes que fueron mis ayudantes alumnos en la Cátedra de Geología General: Carlos Luna y Selene González.
El dibujo comparativo del tamaño con el de un hombre, me lo facilitó el doctor Raúl Leguizamón hace una parva de años, tantos que ese megaterio ya se debe haber muerto….¡Jejeje!
Y por fin, las fotos del dientito son de mi propia colección.
Bibliografía mencionada:
Branson, C.; Tarr, W.; Keller, W.1964. Elementos de Geología. Ed. Aguilar España. 653 pp.
Gonzalez, S.; Luna,C. 2005. Nociones básicas de Paleontología y principales grupos de organismos. Apunte didáctico para uso interno en la U.N.Cba.